El Realengo 18 está ubicado al noroeste del municipio El Salvador, limita al norte con el arroyo Baltasar; al sur, con el valle de Guantánamo; al este, con el río Jaibo y al oeste, con la carretera La Comunal-San Fernando.
Los campesinos (algunos son descendientes de mambises) se asentaban en esas tierras por el derecho consuetudinario heredado de sus padres y abuelos después de haber regado con su sudor durante generaciones completas las tierras en que habían nacido.
Lino de las Mercedes Álvarez fue el líder indiscutible del movimiento campesino y conocedor de la zona. En reiteradas ocasiones tuvo largas discusiones con los gobernantes de turno y jamás se dejó sobornar.
Aglutinó a los campesinos, los movilizó y participó junto a ellos en actos de protesta en lugares como El Vínculo y el Valle de Caujerí. Es hoy ejemplo y guía del campesinado cubano. A partir de la fundación del Partido Comunista de Cuba en 1925, las luchas adquieren un matiz político trascendental, el papel del campesinado era el de incorporarse a las luchas generales de la población y no sólo a reformas de tipo económico.
En 1934 los campesinos obtuvieron armas para luchar contra los terratenientes de origen nacional y extranjero. Ese mismo año la compañía azucarera Corralillo S.A. trató de hacer una trocha para trazar nuevos linderos, ampliar sus dominios y desalojar a los campesinos; pero la protesta fue enérgica, allí se enarboló por primera vez la consigna de Tierra o sangre, tomada como lema en muchos países latinoamericanos donde se lucha a favor de la Reforma Agraria.